// MONTAJE DE SUELO RADIANTE
En este informe presentamos la metodología de instalación
del sistema de calefacción por suelo radiante.
Inicio del montaje
1- Ubicación del distribuidor
A los efectos de facilitar el purgado de los circuitos el
distribuidor será ubicado por encima de estos, a una altura de aproximadamente
70 cm sobre el nivel del piso.
El distribuidor debe instalarse en los gabinetes provistos
especialmente diseñados, ya que facilitan el acceso a los mecanismos de
regulación y control, quedan ocultos y no ocupan espacio.
2- Aislación
Antes de la colocación de las placas aislantes, se deberá
instalar la cinta perimetral en todo el perímetro de la planta, utilizando los
tabiques como apoyo hasta que se coloquen las placas.
La colocación de las placas comienza por una esquina hasta
cubrir toda la superficie. Se debe cubrir la
máxima superficie que sea posible con placas enteras. Los
huecos restantes se cubren con retazos cortados
a medida.
3- Fijación
Una vez finalizado el tendido de las placas de aislación, se
coloca sobre ellas una malla metálica de 4,2 mm soldada cada 15 cm. Por norma,
la variación vertical hacia arriba de los tubos no debe superar los 5 mm, en
tanto que la variación del paso entre tubos no debe ser superior en 10 mm.
A los efectos de poder cumplir con estas prescripciones se
instala esta malla metálica, sobre la cual, por medio de precintos plásticos
ubicados cada aproximadamente 50 cm, se fijará el tubo.
4- Distribución del tubo
Para iniciar la instalación del tubo es necesario el plano
de montaje. En él se consignan la ubicación de los distribuidores y el
recorrido, longitud y paso de los circuitos.
Distribución en serpentín
Esta es la configuración más sencilla. La distribución del
tubo comienza por un extremo del local -muro
externo- y termina en el extremo opuesto. La premisa básica
es que para lograr un calor uniforme el salto térmico entre la temperatura de
ida y retorno no supere los 5°C. Es ideal para locales pequeños.
Distribución en espiral
Se va de un extremo a otro avanzando en líneas paralelas
equidistantes unas de otras, pero dejando espacio para la extensión paralela de
la línea de retorno. Esta configuración se adapta perfectamente a locales
irregulares o alargados.
Distribución en doble serpentín
Se realiza en espiral, avanzando desde fuera hacia el
centro, dejando espacio para la extensión en paralelo del retorno. Este sistema
logra un calor homogéneo en toda la superficie del suelo, ya que se alterna un
tubo de ida con un tubo de retorno. Es la más adecuada para locales con gran
demanda de calor.
-
// INSTALACION DEL SUELO RADIANTE
Para facilitar el montaje del distribuidor del Suelo
Radiante, es conveniente conectar el circuito de la dependencia que queda más a
la izquierda de la llave del extremo izquierdo del mando
Para instalar el tubo es conveniente contar con dos
operarios; que uno desenrolle el tubo mientras el otro lo vaya fijando. El tubo
en rollo debe desenrollarse en el sentido inverso a su enrollamiento,
comenzando siempre por el extremo libre exterior.
Mediante el adaptador del distribuidor, se conecta el
extremo del rollo a la toma izquierda del mando.
Se desenrrolla y extiende el tubo hacia la dependencia
ubicada a la izquierda y se lo distribuye según
el esquema indicado en el plano montaje. El retorno al
distribuidor debe hacerse paralelo al tubo de ida. Con el adaptador del
distribuidor se conecta el tubo al colector de retorno. En el resto de los
circuitos
se procede de la misma manera.
Es conveniente que los tubos que salen del piso o que
atraviesen muros o tabiques estén recubiertos con una vaina de espuma de
polietileno.
Prueba hidráulica de la instalación
Antes de realizar la carga del mortero se debe llevar a cabo
una prueba de presión para eliminar por completo la posible existencia de fugas
en los circuitos. Para ello aconsejamos proceder de la siguiente manera:
Se debe conectar la provisión de agua a la entrada principal
del colector o al grifo auxiliar del vaciado.
Cumplido este paso se debe comenzar el llenado de los
circuitos de manera individual, comenzando desde aquel que se encuentra en el
extremo más alejado de la entrada del colector. Es importante cerrar los
purgadores automáticos antes de iniciar la operación de llenado.
Una vez eliminado el aire existente en el circuito se puede
llenar el siguiente tomando el recaudo de cerrar a aquel que se encuentre
lleno.
Completada la operación de llenado de todos los circuitos se
deben cerrar las válvulas esféricas principales y conectar una bomba de presión
provista de manómetro al grifo auxiliar de vaciado. Previo abrir la totalidad
de los circuitos se da presión hasta alcanzar 6 kg/cm2.
Esta presión debe mantenerse durante 12 horas. Si al cabo de
este tiempo no ha bajado se da la prueba como satisfactoria.
A los efectos de controlar la posible aparición de una fuga
y permitir la posterior dilatación del tubo, se deberá mantener la presión
hasta concluir la operación de llenado del mortero. Aún más, se recomienda
mantener la presión hasta el momento de la puesta en marcha.
Puesta en Marcha
Transcurridos no menos de veinte días del llenado del
mortero, se puede iniciar la puesta en marcha.
Poniendo en funcionamiento la bomba de circulación, se
procede a purgar los circuitos. Concluida esta operación se eleva la
temperatura del agua hasta alcanzar los 25 °C. A esta temperatura se deberá
mantener
al menos durante tres días. Al cabo de éste período, puede
funcionar a la temperatura máxima deseada.
Como regla general, para la aplicación del revestimiento
final, cerámica, alfombra o madera, la calefacción deberá apagarse antes,
durante y hasta los siete días posteriores a su colocación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario